Entre muchos datos que llaman la atención, el último estudio de “Lima Como Vamos” indica que el 20% la población de Lima Metropolitana invierte para trasladarse de su casa a su centro laboral y viceversa, entre 2 y 4 horas diarias. Si hacemos números, representa una inversión aproximada de 5,100 soles al año, en tiempo perdido por persona, considerando que se le remunera por sueldo mínimo. Más impactante es que en definitiva atenta contra equilibro en la vida laboral y personal de los trabajadores. ¿Qué opciones laborales y de transporte tienen para ahorrar tiempo y dinero?
Las empresas no pueden mantenerse al margen y deben dar paso a iniciativas que ayuden a reducir la pérdida de tiempo de sus trabajadores y optimizar sus rendimientos. Hay iniciativas que requieren ser más extensivas y que ya se vienen aplicando en sectores como construcción, industrial y consumo masivo, tales como los traslados en buses en distintos puntos de la ciudad. Eso asegura una menor tasa de ingresos tardíos al trabajo y un espacio para otras actividades de interacción o de formación, que mejoren el rendimiento del colaborador. Aunque puedan verse algo costosas para el empleador, es tiempo de evaluar el beneficio.
Lima, pese a ser una metrópoli en construcción, ya cuenta con otras iniciativas empresariales que incentivan el uso de vehículos pequeños como bicicletas o motos. Con ello se aporta a la reducción de la circulación de vehículos en tramos cortos y se crea una cultura más sostenible y de cuidado del ambiente.
¿Qué nos lleva a pensar en todo esto? Estamos obligados a cambiar y a pensar en la sociedad y nuestros colaboradores. Ahora con los aplicativos móviles, las empresas tienen la opción de incentivar el “carpool”, ya sea con contratos exclusivos con empresas de taxi o, por otro lado, generar que los trabajadores compartan un mismo vehículo particular, ofreciéndole al conductor un vale de combustible y así hacerlo de forma rotativa con los demás trabajadores.
El teletrabajo y/o la telepresencia serán opciones a las que los empleadores nos tendremos que adaptar en un futuro nada lejano. Es común ya en otros países ver puestos de atención donde el cliente se acerca a una oficina, pero el empleado lo atiende desde su casa, a través de un módulo virtual. Un ejemplo específico es Hertz, empresa de alquiler de automóviles, donde a través de una conexión virtual dirigida por un empleado desde su hogar, asigna un vehículo, valida la identidad, toma la firma en pantalla e imprime los documentos del alquiler.
Es claro que el tráfico vehicular es un problema que necesita más de una solución. Por ello, el empresariado y los ciudadanos deben adoptar medidas que los ayuden a movilizarse de forma más segura, rápida y con menor estrés. ¿Es tiempo de descentralizar los centros empresariales de los distritos más concentrados? ¿Es el tráfico una amenaza para la sostenibilidad empresarial? Más allá de notarlo, las empresas y los empresarios responsables estamos llamados a hacer algo más significativo ante esta realidad.